Podemos Madrid y el desencuentro con la democracia

Ramón Espinar y José Manuel López

Se lo preguntaba a Gaia después de la que se ha montado con la destitución de José Manuel López como portavoz de Podemos en la Asamblea de la Comunidad de Madrid. Gaia es inteligente y entiende cuanto le digo. Me responde con palabras que no se articulan en su boca, pero que yo entiendo perfectamente, y me son útiles para acercarme a una mejor comprensión de las cosas. Le he preguntado: Gaia, ¿tú crees que es un acto democrático la sustitución de José Manuel López por Lorena Ruiz-Huerta? Ha sido un acuerdo del Consejo Ciudadano de Madrid. Ha habido una votación. Y en esa votación ha sido mayoritaria la opción de destituir a José Manuel López y nombrar en su lugar a Lorena Ruiz-Huerta. No es que José Manuel López lo estuviera haciendo mal ni que se entienda que Lorena Ruiz-Huerta lo vaya a hacer mejor, aunque ya era Portavoz Adjunta. La propuesta ha sido de Ramón Espinar, que ya le venía dando vueltas al asunto desde que su candidatura ganó en Madrid y él resultó elegido Secretario General de Podemos Madrid. José Manuel López fue miembro de la otra candidatura, la que encabezaba Rita Maestre. Rita Maestre y José Manuel López forman parte de esa corriente ideológica que ha venido en llamarse errejonismo, por Íñigo Errejón, secretario de Política y Área de Estrategia, en contraposición al pablismo, por Pablo Iglesias, el Secretario General. Ramón Espinar es pablista declarado, incluso suele ejercer de centurión del pablismo en Madrid. Lorena Ruiz-Huerta es de Anticapitalistas. Anticapitalistas pactó su apoyo a la candidatura de Ramón Espinar en Madrid a cambio de algunas modificaciones en sus propuestas. Anticapitalistas no es un corriente dentro de Podemos, Anticapitalistas es un partido político integrado en Podemos, con su dirección, sus órganos de decisión propios, su estrategia política diferenciada. En Anticapitalistas, los jefes dan órdenes y los militantes las acatan. En Anticapitalistas se funciona con el llamado centralismo democrático, una vieja reliquia leninista de ciertos partidos de orientación marxista, y una forma, también, de disfrazar el ordeno y mando de los jefes, aunque Anticapitalistas es troskista. Hay quien dice que el nombramiento de Lorena Ruiz-Huerta es el primer pago en especie del pablismo, vía Ramón Espinar, a Anticapitalistas por el apoyo de Madrid. Y hay quien dice que es parte de un pacto de mayor calado, según el cual Pablo Iglesias entregaba Andalucía a Anticapitalistas a cambio de que Madrid fuera pablista. Teresa Rodríguez, cuya candidatura venció en Andalucía, es miembro de Anticapitalistas, y el pablismo no presentó candidatos en Andalucía.

Y le he contado también a Gaia que estos días ha habido una votación en Podemos para decidir sobre los procedimientos por los que se ha de regir Vistalegre II, y que ha ganado la propuesta de los afines a Pablo Iglesias, aunque no con holgura, aun cuando ellos esperaran arrasar. De hecho todos han reconocido, incluso Pablo Iglesias, que el mensaje de la militancia podemita es el del entendimiento y el pacto, que nadie podrá caminar en Podemos sin contar con los demás compañeros. Eso han dicho. En puro cálculo matemático, el 41% del pablismo, el 39% del errejonismo y el 10% de Anticapitalistas, obliga a un gran acuerdo entre pablismo y errejonismo para sacar de Vistalegre II un Podemos unido y con nervio, o a pactar uno de ellos con Anticapitalistas para asegurarse una victoria interna, con independencia del Podemos que de este tipo de arreglos resulte. Hay quien deduce que la decisión de sustituir a José Manuel López por Lorena Ruiz-Huerta es un primer paso hacia este último viaje. Por eso Íñigo Errejón, al conocer la noticia, ha dicho: "No es el camino". Y no es el camino han dicho otros y otras errejonistas. Pablo Iglesias ha dicho que no le incumbe, que es un asunto de Madrid, que Madrid es autónomo para tomar esas y otras decisiones, aunque también ha dicho (véase entrevista en Infolibre) que le parece bien que se nombre a mujeres para esos puestos, que es una forma de feminizar la política. Como si esa afirmación no encubriera en realidad su apoyo a la decisión y él fuera un experto en feminismo, que seguramente lo sea, y ni tú ni yo, Gaia, entendamos de estas cosas, al fin y al cabo tú sólo eres una perra y quizá yo sea un antiguo.

Pero, entonces, ¿es o no es democracia eso de relevar a José Manuel López por Lorena Ruiz-Huerta al frente de la portavocía de Podemos en la Asamblea de la Comunidad de Madrid? ¿Y es justo el relevo? Las preguntas me las formula Gaia mirándome fijamente a los ojos. ¿Y qué es democracia, Gaia? ¿Qué hace que una decisión sea o no justa? No vayas al diccionario, habla por tu experiencia. Que se vote no significa que haya democracia. En el PCUS se votaba y no creo que pueda decirse que el estalinismo fuera una forma de democracia. Ni que pueda serlo hoy en día. Los votos disfrazaban una forma dictatorial de gobierno. Detrás de muchos votos se esconden lealtades inconfesables. No hay democracia sin respeto a las minorías. La destitución de José Manuel López es una muestra de desprecio a las minorías. Anticapitalistas sabe mucho de todo esto. O la imagen de un piolet sobre la cabeza de Trostky seguro que les refresca la memoria. El hashtag #ÍnigoAsíNo que se ha apresurado a difundir la guardia pretoriana del pablismo tiene la extraña forma de un piolet dispuesto a caer sobre la cabeza de Íñigo Errejón y la de todos los que se han quejado del acuerdo del Consejo Ciudadano de Podemos Madrid. Legítimo, sí, ajustado a lo establecido por las normas, pero no justo. No todo lo que se ajusta a las normas es justo.

Se ha hablado de la importancia de las palabras para conquistar el futuro. Quien es dueño de las palabras dispone de las herramientas para escribir la historia. Si queremos que la historia sea amigable e inclusiva, las palabras tienen que ser exactas. Cuando se releva a los que no pertenecen a nuestra corriente ideológica no se está haciendo un ejercicio democrático, se está procediendo a una purga, a la exclusión del diferente por el hecho de ser distinto. Y esto tiene mucho que ver con el viejo estalinismo. De esto también sabe mucho uno de los nuevos aliados de Pablo Iglesias, quizá pudiera instruirle, o quizá ya le ha instruido, Alberto Garzón, cuyo partido ha preferido ignorar la mitad de su historia con tal de no tener que referirse a personajes incómodos (remito a la entrada "90º aniversario del PCE", de fecha 18/04/12).

Qué viejos pueden ser los jóvenes.

Noticia de última hora, 24 después de publicarse esta entrada: Pablo Echenique ha mutado en Ramón Montaner.