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miércoles, 10 de junio de 2009

Nana para Ginebra




Por las calles de Madrid
vaga la luna lunera,
salta que salta tejados,
está buscando a Ginebra.

Canta que canta una nana
con el xilofón de estrellas
la luna en los rascacielos.

Oigamos su cantinela,
a ver qué dice en su plática:
oh, es juglar de una reina
la reina en la noche clara.
-Vengo desde la leyenda,
del origen que fue tuyo
antes de que tú nacieras.
Yo, sin luz, hasta la luz.

Su falda de blanca seda,
mágica noche de brujas,
se extiende por las aceras.
Es la mar, jazmín celeste
que asciende a las azoteas.
Reconoce la ventana.
Y se acoda en el alféizar.

Teje con agujas blancas
sueños que en la cuna cuelga.
La niña va y los atrapa
y sobre los sueños vuela.
La luna se mece, mece.

La niña se sueña, sueña.

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