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Haití
1.
Eli, eli,
lama shevaktani. (Mateo 27, 46, y Salmos 22, 2)
2.
Existen
males mayores que los que esos pobres de Haití están viviendo estos
días. Nosotros nos lamentamos mucho de esos pobres de Haití y
también deberíamos, además de poner toda nuestra solidaridad en
ayudar a esos pobres, nuestros medios económicos, etc., también
deberíamos llorar por nosotros, por nuestra pobre situación
espiritual, por nuestra concepción materialista de la vida. Quizá
es un mal más grande el que nosotros estamos padeciendo que el que
esos inocentes también están sufriendo (sic, José Ignacio Munilla,
obispo de San Sebastián, en la SER, 14/01/09).
3.
Pat Robertson, ex candidato a la presidencia de EEUU, predicador
evangelista, afirma que todos los males de Haití provienen del pacto
que firmaron con el diablo para librarse de la dominación francesa.
4.
Haití, o
tierra de montañas, en el idioma indio original, capital
Port-au-Prince o Puerto Príncipe.
5.
En Haití no
hay agua potable; antes, tampoco.
En Haití no
hay infraestructura sanitaria; antes, tampoco.
En Haití
hay problemas de seguridad y pillaje; antes, también.
La educación
es obligatoria de 6 a 12 años, pero sólo el 52,9% está
alfabetizado; antes, también.
La esperanza
de vida es 57 años; antes, también.
Haití tiene
la renta per cápita más baja de toda América y el 70% de la
población vive en la pobreza absoluta, antes y ahora.
Haití está
ahora en el centro de la actualidad mundial; antes, no y, dentro de
poco, tampoco.
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